Veníamos de un primer día sorpresivo, donde Hirvonen Sordo y Loeb estaban a pocos segundos de diferencia entre ellos. El panorama se veía interesante, pues Mikko mantenía la delantera sobre su rival directo en el campeonato, el francés Sebastian Loeb. Mientras que, fuera de los puestos del podio, los hermanos Solberg demotraban un buen nivel, superando a un joven Latvala, que aun no encuentra el norte este año.
Los siguientes dos especiales fueron del galo, ni Sordo ni Mikko lograrón pasarlo y Loeb se quedó en primer lugar previo a la llegada al parque de servicio para dar termino a la primera parte del sábado, con una ventaja de 5.3 segundos sobre el volante principal de Ford, Mikko Hirvonen (2º). “Ha ido bien, pero Sebastien y el Citroën son muy rápidos,” ha dicho. “Aún estamos cerca, creo que nos espera una buena lucha. En las secciones estrechas y con curvas nos cuesta correr. No estoy seguro de lo que podremos hacerle al coche ahora, pero espero realizar algunas modificaciones para que no derrape tanto.”
Dani Sordo iba tercero, seguido de Peter Solberg, que si bien marcaba buenos tiempos, estaba con dudas. “El motor no está preparado para correr en tramos de gran altitud, ya lo sabíamos, y para ser sincero es un poco aburrido,” ha dicho “Los tramos de ayer no se encontraban a tanta altitud y hacía un poco más de frío. Cuando hace calor o estamos muy alto perdemos potencia. Aun así está yendo bien, solo que no estoy tan contento como ayer.”
Completando la tabla estaban Latvala, H. Solberg, Wilson y Villagra. El único retiro fue el de Conrad Rautenbach, una roca terminó con sus esperanzas de terminar el rally Argentina, donde terminará cuarto el año pasado.
Los tramos de la tarde presenciaron más de una complicación para los pilotos, asi como unos cuantos retiros. Loeb se mantuvo primero en la general, por más impulso que le metiera Mikko, quien ganaba el 14º especial, pero en el siguiente sufrió de sobrecalentamiento del motor, lo que le obligo a disminuir la velocidad, perdiendo tiempo valioso frente a Loeb y Sordo. Al finalizar el día, Ford anunció que Hirvonen se retiraba del rally.
"Estoy frustrado, porque había ganado tiempo en el tramo anterior y creo que mañana hubiéramos estado luchando hasta el final,” ha comentado Hirvonen. “Tenía posibilidades de ganar, pero incluso un segundo puesto me hubiera dado opciones de cara al campeonato. Ahora será muy difícil. Argentina no me ha ido bien."
Por su lado, los hermanos Solberg sufrieron de pinchazos, ni bien iniciado el segundo bucle del día, lo que los perjudicó con los tiempos, siendo Henning el único que no perdió su puesto.
Con el retiro de Mikko, Loeb solo tenía que mantenerse tranquilo, pues los demás pilotos no tenían manera de alcanzarlo. “Esta tarde no hemos tenido problemas, ha sido una buena carrera, sin errores,” ha dicho Loeb. “Ahora tenemos una buena ventaja y tenemos que centrarnos en mantenernos dentro de la pista.”
Los dos últimos especiales (en la carretera) no tuvieron mayor cambio en la clasificación general, incluso con el retiro del joven piloto francés Sebastien Ogier, en el 17º tramo del día. El campeón junior del 2008 se reincorporaría el domingo bajo la modalidad de SuperRally. Con esto terminaba el recorrido del sábado, dejando pase al Super Especial en el Estadio Córdoba, nuevamente.
La clasificación quedó de la siguiente manera: Loeb, Sordo, Latvala, P. Solber, H. Solberg, Villagra, Wilson y Al-Attiyah (PWRC). Ogier va noveno.
Al finalizar el día, por la mente de los pilotos solo queda la idea de mantenerse dentro, Loeb ya es inalcanzable. “Sordo está demasiado lejos como para alcanzarle mañana, incluso si le recortáramos un segundo por kilómetro no bastaría,” ha dicho Latvala. “El plan es seguir como hasta ahora. La tarde ha ido muy bien y ha sido una buena inyección de confianza. Hemos sido capaces de atrapar a Henning y a Petter, y luego Mikko ha abandonado, lo cual ha sido una lástima, pero estoy contento con mi posición.”Con cuatro especiales por delante y un gran cierre de fiesta, veremos si Loeb se mantiene imparable, o tendremos un ganador inesperado.
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